La vitamina D es una vitamina liposoluble que se almacena en el hígado y en los tejidos grasos del cuerpo. Esta vitamina cuyos beneficios para la salud son ampliamente reconocidos es poco ingerida en la alimentación (20%) y es fabricada, esencialmente, con la exposición de la piel a la luz solar (80%). 

Numerosos estudios epidemiológicos (estudio SUVIMAX Francia 2003; Vitamin D deficiency, The New England Journal of Medecine, Julio 2009…) muestran deficiencias de vitamina D en todos los grupos de la población: niños, adolescentes, mujeres, personas mayores… A pesar de que en España tengamos un clima de diez (al menos en Barcelona) tampoco nos libramos del déficit. Se cree que el uso de fotoprotectores, como incide el sol en la tierra en invierno y las pocas horas que estamos al aire libre nos están dificultando llegar a los niveles de vitamina D necesarios.

La vitamina D se puede cuantificar en sangre bajo el nombre de un metabolito llamado 25-hidroxivitamina D el cual debería estar por encima de 20ng/ml, generalmente en el médico piden esta analítica en personas que presentan un riesgo de déficit pero también lo podrás encontrar en la farmacia mediante una sencilla prueba de sangre capilar.

A pesar de que la vitamina D siempre ha destacado por ser la cuidadora de nuestros huesos ya que ayuda a fijar el calcio en ellos y también en la absorción intestinal de este mineral, tiene numerosas funciones a parte de esta como por ejemplo, la prevención inmunitaria o la regulación de las hormonas femeninas. También se ha relacionado un déficit de vitamina D con dificultades a la hora de la concepción.

Se recomienda tomar vitamina D a:

• Mujeres en edad de menopausia (o próximas a ella), como prevención o tratamiento de la osteoporosis.
• Protección de la masa ósea en personas mayores.
• Complemento en recuperación tras fracturas óseas.
• Crecimiento.
• Embarazo.
• Prevención inmunitaria.
• Envejecimiento, Osteoporosis
• Trastornos del ciclo menstrual ya que participa en los niveles circulantes de estradiol y progesterona.
• Disminución de la fertilidad.

La dosis recomendada de vitamina D varía según el grupo poblacional siendo diferente en las etapas de la vida y siendo mayor las necesidades sobre todo en la mujer menopáusica y la prevención de la osteoporosis. Además, la dosis también variará según los niveles de los que partas, si partes de un déficit al principio la dosis será mayor. En general, va de los 800 UI a los 1000 UI diarios.

A la hora de elegir la mejor opción tendremos en cuenta:

• La forma activa que es el colecalciferol o vitamina D3.
• Las formas aceitosa para su perfecta absorción (vitamina liposoluble), ya sea con aceite de girasol o aceite de oliva.
• La presencia de vitamina E natural (mezcla de tocoferoles) contribuye a estabilizar el producto frente a la oxidación.
• Las gotas van a permitir ajustar fácilmente la posología en UI según las dosis recomendadas o según la concentración plasmática de 25-OH Vit D3.
• Posología diaria: aunque la vitamina d se pueda tomar de forma diaria, semanal, quincenal o incluso hay medicamentos que son mensuales, hay algunos estudios que confirman que la forma más fisiológica y que por tanto mejor de tomarla es diaria.

¿Cuando tomar la vitamina D3 con la K2?

La vitamina K2 es imprescindible para la incorporación del calcio a la matriz del hueso. Por ello es esencial para la salud ósea. Además, va a impedir que el calcio se deposite en las arterias por lo que es esencial para la salud del corazón.

Al ser una formulación en cápsulas normalmente no se puede dosificar con lo que yo no le recomendaría a una persona con déficit de vitamina D si no más bien a alguien en dosis de mantenimiento o que quiere prevenir un déficit.

Es ideal en mujeres menopáusicas o que tengan un mayor riesgo cardiovascular salvo aquellas personas que estén con anticoagulantes (Aldocumar, Sintrom…)

¿Cuando tomar la vitamina D3 con calcio?

El calcio sí se obtiene de la alimentación y no con mucha dificultad aunque es verdad que hay ciertas poblaciones que sería interesante el mix de vitamina D y calcio ya que los requerimientos de calcio son mayores.

Por un lado, las personas con osteoporosis ya que deben tomar 1.500 mg/día (mucho más que la mayoría de población) y por el otro, personas con tratamientos continuados de glucocorticoides.

Las formas farmacéuticas que combinan el calcio con la vitamina D suelen ser comprimidos en los que no podemos dosificar la vitamina D y que además al no encontrarse en su forma oleosa la absorción no será tan buena. Así que menos es más, si tu ingesta de calcio es suficiente toma vitamina D sola.

¿Existen opciones veganas?

La gran mayoría de vitaminas D se extraen de la lanolina, una grasa extraída de la lana del carnero. 

Otra opción es la vitamina biane D3 de pileje que se extrae de un liquen y  se formula con aceite de colza, es por eso que es compatible con la alimentación vegana/vegetariana.